En fin, adaptarse a una rutina distinta, asumir otro tipo de responsabilidades y lograr que mis viejos no sufran tanto el destete, no me es fácil.
No sé si estoy muy equivocada, pero necesito vivir mis experencias aunque me caguen. Acepto consejos y escucho cómo le fue a los demás; pero eso no implica que tenga que correr la misma suerte que "ellos".
Sé que cualquier persona cuando realmente necesita trabajar, poco le importa el precio que tenga que pagar. Tal vez este sea mi caso. La búsqueda ha sido intensa durante todo este año: entrevistas de aquí y de allá, CVs con todos los formatos y tamaños, test psico- técnicos, etc. En la semana donde más negra vi mi futuro laboral encontré un aviso en Tribunales y....... allí fue. Me llamaron, la PROPUESTA INCREÍBLE y aquí estoy, luchando por integrarme, por comprender cómo funciona la praxis judicial, con una jefa particular y dedicada 100 % al trabajo.
Tensa, a 220 las 24 horas; pensando que hice, que tengo que hacer, quien viene al estudio y a quien hay que llamar.
En fin, así estoy por estos días ; con la cabeza que me estalla.
Les dejo un beso a todo aquel q pase y lea. Cuando vuelva a hacerme otro tiempito posteo algo.
Espero que despúes de todo haya luz al final del camino. Por ahora, sólo puedo transitarlo y esperar.
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